Tras los sucesos acontecidos la semana pasada en la capital de Francia parecen ser malos momentos para la multiculturalidad pero, sin embargo, desde nuestro punto de vista la tolerancia hacia la mayoría pacífica que compone las diferentes culturas que nos rodean es algo capital en nuestra sociedad y por ello vamos a relatar un caso de éxito de una plantilla multicultural.
El caso en concreto se refiere al London City Airport, uno de los seis aeropuertos de la capital británica que cuenta con unos 2000 trabajadores. Medio millar son directamente contratados por LCA y de todos ellos, casi un 15% son de nacionalidades diferentes a la británica.
Para ser más específicos, la plantilla del LCA la componen trabajadores de 28 países distintos, entre ellos España y su gerente, Mr. Collier explica que los motivos que les han llevado a ello es que Londres es una de las ciudades más cosmopolitas del mundo y por lo tanto, el aeropuerto debe ser un fiel reflejo también de la vida londinense. Además, tal diversidad hace posible que muchos de los viajeros que pasan por el aeropuerto a diario puedan ser atendidos en su lengua materna, algo que aporta valor al aeropuerto porque cuando está a miles de kilómetros de su hogar no hay nada como escuchar las palabras con las que uno se ha criado.
Un gran ejemplo en el que la multiculturalidad de la plantilla mejora de forma directa el funcionamiento de una empresa. Además, en España el aumento de personas de nacionalidad extranjera ha ido aumentando de manera constante en los últimos 30 años, con lo que no resulta difícil encontrar a personal cualificado de diferentes personalidades (fuente: www.portalinmobiliario.com)
