Entrevistamos a Raúl Benito Pertusa, que nos responde sin tapujos acerca de como se motiva a los trabajadores en Eboca y que metodologías utilizan para que su trabajo sea más productivo.
Desde Ebocame siempre intentamos transmitir la necesidad de que haya un buen ambiente en el lugar de trabajo, es una de las máximas de Eboca, pero ¿Cómo se transmiten estos ideales en el día a día con los trabajadores?
El lugar de trabajo, aunque alguien lo cuestione, forma parte del mundo en el que vivimos. Asimismo el tiempo que dedicamos al trabajo también forma parte del tiempo que vivimos.
Todos queremos un buen ambiente en nuestra vida y el trabajo es una parte importantísima de la vida. Si queremos un entorno agradable y una relaciones humanas gratificantes debemos ser proactivos en conseguirlo y de manera muy especial en el lugar de trabajo pues pasamos muchas horas en él, rodeados de muchas personas. El éxito está garantizado si entendemos y asumimos, en alguna medida, estos simples conceptos.
Solo alguien feliz puede poner su pasión al servicio de la Misión de la empresa.
Lógicamente las empresas tenemos una importante responsabilidad y debemos poner los medios que faciliten la mejora de la calidad de vida y el ambiente en los centros de trabajo. En Eboca tenemos una doble responsabilidad: la que afecta a nuestro equipo y la que afecta a las personas que trabajan en todos los Centros de Trabajo en los que prestamos servicio. Nuestra Misión es ayudar a las empresas que confían en nosotros a mejorar el espacio y el tiempo dedicado al descanso y a la interacción informal entre los trabajadores que, como todo el mundo sabe, es una variable muy importante en la mejora del ambiente laboral.
¿Qué aspecto considera que debe revisar en primer lugar una empresa para comprobar si sus trabajadores son felices y disfrutan en su trabajo? ¿Y cuáles serían los primeros pasos a dar?
Los más importantes son los inmateriales, los emocionales, aquellos que tienen que ver con las relaciones entre y con las personas. Para que la felicidad en el entorno laboral prospere son necesarias la confianza, lealtad, autonomía, respeto, conciliación, humanidad, agradecimiento etc. y sobre estas premisas se consigue fácilmente un buen ambiente de trabajo.
También es muy importante poner en valor la contribución de la empresa a la sociedad. Cuanto más y mejor sea la contribución de la empresa a mejorar la sociedad más orgullosos estarán los que trabajan en ella y sobre este orgullo de pertenencia florece fácilmente la satisfacción y la felicidad. Por ultimo están los factores materiales y ambientales. Buenas condiciones de trabajo, instalaciones adecuadas, iluminación, climatización, vistas, zonas de descanso y esparcimiento etc.
Los indicadores claros de que algo falla son la rotación de personal, el absentismo, las malas caras, la falta de colaboración entre las personas, interacciones de baja calidad con los clientes etc.
Eboca es muy dada a realizar eventos y jornadas en las que la plantilla al completo se reúne para tener un día de ocio, lo hemos visto en este blog. ¿Cómo ayudan estas actividades a mejorar las relaciones personales?
Es una pescadilla que se muerde la cola. Hacemos cosas juntos porque disfrutamos compartiéndolas y haciéndolas crece la empatía.
Comente la frase: «En nuestra empresa no somos tan felices, pero ganamos más pasta». ¿No es el dinero la mayor motivación?
Es un elemento de motivación pero no el más importante. La fijación de las retribuciones del personal de una empresa es un excelente momento para practicar la justicia y la equidad. En Eboca nos esforzamos en pagar lo mejor posible y en ofrecer un futuro en el que se puede crecer y mejorar. Sabemos que para ser feliz es importante sentirse justamente valorado.
Cambiar “pasta” por felicidad me parece un error.
Y al hilo con la anterior cuestión, las empresas no son ONGs, están para ganar dinero. ¿O no? ¿Por qué debería una empresa preocuparse por la felicidad de sus trabajadores?
A este asunto podríamos dedicar un monográfico….
Una empresa debe ocuparse de la felicidad de sus trabajadores
Confundimos las empresas con los accionistas. Los accionistas sí que suelen estar para ganar dinero pero las empresas son mucho más que sus accionistas, las empresas son además sus trabajadores, sus clientes, sus proveedores y la contribución que hacen a mejorar la sociedad con sus productos y servicios.
Una empresa debe ocuparse de la felicidad de sus trabajadores por dos razones: primero porque es lo decente y lo segundo porque solo alguien feliz puede poner su pasión al servicio de la Misión de la empresa.
¿Cómo se justifica dentro de la «filosofía Eboca» el uso de programas informáticos de control del desempeño para los propios trabajadores? ¿Es compatible eso con la felicidad en el trabajo?
No son programas para cazar o pillar a la gente, sino para descubrir nuestros puntos fuertes y débiles, dónde somos más y menos eficientes, y así sepamos aumentar nuestra productividad como equipo, nuestro nivel de calidad y, con ello, mantener viva la Misión de nuestra empresa.
Para terminar, se rumorea que Eboca nunca ha repartido los beneficios de su actividad empresarial entre sus accionistas. ¿A qué se debe y qué se ha hecho con ellos?
Es cierto, desde su fundación hace casi treinta años Eboca nunca ha repartido dividendos entre sus accionistas. De los beneficios que obtenemos el 27 % se reparte entre toda la plantilla a partes iguales, el 25 % se destina al pago del Impuesto de Sociedades y el resto, algo menos de la mitad, se destina a financiar las inversiones necesarias para prestar un servicio de calidad a nuestros clientes y al desarrollo de nuevos productos y servicios.