¿El trabajo te supera? ¿Te despiertas y lo primero que piensas es que no quieres ir a trabajar? ¿Estás apático? Estar quemado en tu puesto de trabajo no es nada agradable y baja tu ambición, productividad y rendimiento. Todos pierden, tu en felicidad y la empresa a la hora de valorarte. Este síndrome es conocido como Burn-ou y sin duda es un problema que hay que resolver. Como todos identificamos el problema, vamos a dar paso directamente a una serie de consejos para salir adelante y superar esta situación.
- Siéntate un día en tu mesa y mira a tu alrededor. ¿Te gusta lo que ves? ¿Tu puesto de trabajo está ordenado, tiene toques personales, la ventana da a un lúgubre patio de luces o a una pared de hormigón a dos metros de distancia? Sin duda una oficina triste puede trasladar un estado de ánimo taciturno a su usuario principal.
- A continuación analiza que tareas de las que desarrollas en tu trabajo te gustan más y las que detestas. En todos los empleos nos hacen encargos de tareas que no nos gustan, ya sea puntualmente o periódicamente, pero el problemas es cuando la gran mayoría del trabajo que desarrollamos para una empresa no nos motiva suficiente. En ese caso deberíamos transmitírselo a nuestro superior con el objetivo de encontrar una solución.
- La ayuda psicológica es siempre un buen canal para salir de los atolladeros personales. Además, hay psicólogos específicos en apartado laboral.
- Por último, el Síndrome Burn-out ha sido ampliamente desarrollado en libros. En ellos se puede identificar cuáles son sus fases, síntomas y posibles soluciones. Es una forma fácil de ampliar información a partir de este artículo.
Si a pesar de los esfuerzos no consigues la motivación necesaria, el mejor camino puede ser cambiar de trabajo. Empieza a sondear el mercado laboral y da el salto para que el Burn out no te repercuta a nivel personal.