Las relaciones personales en el trabajo son importantes y en muchas ocasiones este contacto es tan estrecho que aquellos que eran tus compañeros de trabajo se convierten en tus amigos y confidentes. Personas con las que sales a tomar algo después de trabajar o que escuchan tus problemas personales y te aconsejan a la hora de tomar decisiones.
Es importante saber gestionar las amistades en el trabajo ya que si no pueden aparecer problemas en el día a día laboral. A continuación, unas pinceladas para saber cómo llevar esta situación a buen puerto:
– Los asuntos que conciernen a lo personal es mejor no tratarlos en el ambiente de trabajo y esperar al descanso o a la hora de comida si se trata de una larga historia.
– Hay que tener cuidado en las redes sociales ya que añadir aunque añadir amigo al Facebook es lo habitual, pero añadir a un amigo que trabaja con nosotros puede traernos problemas.
– En los casos en los que el compañero todavía no puede ser considerado todavía nuestro amigo es importante ser amable y preguntar acerca de la familia o las vacaciones, pero sin llegar a ser cotilla, ya que podría molestar mucho a la otra persona.
Por lo general, muchos expertos aseguran que las amistades en el trabajo aumentan de forma considerable la motivación y la productividad. Sin embargo, como siempre decimos, dependerá de las personas y del ambiente de la empresa. Esperamos que estas recomendaciones te sean de utilidad.