Hoy estamos golosos y queremos contagiároslo con mousse de café, por qué es un postre ideal para triunfar y cuál es su receta.
El mousse de café es un postre ligero y suave que apetece tanto después de una comida ligera como una de esas cenas en las que no te entra nada más. Este postre dejará un buen sabor de boca a tus familiares o amigos, y nunca mejor dicho. Es la dulzura y la sencillez en un plato cremoso y apetecible.
La receta es muy fácil, a continuación te la contamos.
Solo tienes que tener a mano:
- 3 cucharadas de azúcar
- 4 cucharadas de agua
- 1 cucharada de café soluble
- 3 yemas de huevo
- 175 ml. de nata líquida
- chocolate blanco de cobertura
- chocolate negro de cobertura
Para empezar, pon una cazuela en el fuego y vierte el agua y el azúcar. Añade el café soluble. Dale vueltas lentamente y espera que el azúcar y el café se disuelvan. Espera a que hierva 3 minutos.
Utiliza una batidora de varillas eléctrica para batir las yemas y poco a poco ve añadiendo la mezcla anterior. No dejes de batir hasta que quede completamente una masa esponjosa uniforme.
También debes usar unas varillas para montar la nata. A ser posible que esté muy fría. Después, mezcla la nata con la masa anterior.
Solo falta servirlo en dos recipientes individuales y meterlos al frigorífico. Para conseguir el toque final y una buena presentación ralla los chocolates y añade dicha ralladura encima de cada recipiente de mousse.
Puedes adornarlo también con más detalles que te gusten como hojas de menta o rodajas de naranja, por ejemplo.
Si te ha gustado, la próxima vez prepara más raciones e invita a tus amigos o familiares.
Puedes probar también con la Receta de tarta de café bombón y queso mascarpone o crear platos con un toque de café como mencionamos en 3 ideas gastronómicas con el café como protagonista.